¿Quienes somos?

Los Estados miembros deben establecer servicios de asesoramiento a las explotaciones con el fin de mejorar la gestión sostenible y el rendimiento general de las explotaciones agrícolas y las empresas rurales, abarcar las dimensiones económica, medioambiental y social, e identificar las mejoras necesarias en todas las medidas a nivel de explotación previstas en los planes estratégicos de la PAC. Estos servicios de asesoramiento a las explotaciones deben ayudar a los agricultores y otros beneficiarios de la ayuda de la PAC a ser más conscientes, por un lado, de la relación entre la gestión de la explotación y la gestión de la tierra, y por otro lado, de determinadas normas, requisitos e información, incluidos los relacionados con el medio ambiente y el clima. La lista de estos últimos incluye normas aplicables o necesarias para los agricultores y otros beneficiarios de la PAC y establecidas en el Plan Estratégico de la PAC, así como aquellas derivadas de la legislación sobre el agua, el uso sostenible de pesticidas y las iniciativas para combatir la resistencia a los antimicrobianos y la gestión de riesgos.

Para mejorar la calidad y eficacia del asesoramiento, los Estados miembros deben contar con todos los asesores, tanto públicos como privados, y redes de asesoramiento del Sistema de Conocimiento e Innovación en Agricultura (SCIA), a fin de poder proporcionar información tecnológica y científica actualizada desarrollada gracias a la investigación y la innovación.

Para convertirse en una política más inteligente, moderna y sostenible, la PAC se ha abierto a la investigación e innovación interactiva al servicio de las diversas funciones que desempeñan la agricultura y los sistemas alimentarios de la Unión, invirtiendo en el desarrollo tecnológico y la digitalización, y mejorando, asimismo, el acceso a nuevos conocimientos que sean imparciales, fiables y pertinentes.

La introducción y adopción de tecnologías requiere nuevas habilidades y conocimientos para agricultores y asesores. Sensibilizar y organizar la formación a nivel regional / local es fundamental, especialmente para llegar a las pequeñas y medianas explotaciones donde el uso de tecnologías digitales no siempre se considera rentable. Los Sistemas de Conocimiento e Innovación Agrícolas (AKIS) pueden desempeñar un papel importante en la promoción del aprendizaje mutuo, para generar, compartir y utilizar el conocimiento y la información relacionados con la digitalización en la agricultura.

La complejidad de los aspectos técnicos y comerciales de los actuales procesos de producción hacen imprescindible que los asesores, además de su formación básica, puedan acceder sistemáticamente a una actualización de sus conocimientos mediante una formación continua de calidad e independiente. En esta plataforma, este aspecto está garantizado por la labor que viene desarrollando desde hace unos años la Fundación para la Agricultura del Conocimiento.

Los anteriores aspectos forman parte de los objetivos transversales de la nueva PAC y, en la medida de nuestras posibilidades, contribuir a su consecución será nuestra meta para los próximos años: a pesar de que los objetivos de la Gestión Integrada de Plagas seguirán siempre vigentes, es evidente que habrá que abordarlos dentro de un marco holístico del que formen parte todos los ámbitos de asesoramiento.

Esta perspectiva general fue consensuada en la reunión de la Asamblea General de APROGIP celebrada en marzo de 2021, donde se aprobó por unanimidad empezar colaborando con los miembros de la Alianza Agroalimentaria Aragonesa en la implantación de un sistema de asesoramiento integral en nuestra Comunidad Autónoma. En una primera fase, esta colaboración ha fructificado en un acuerdo con la Fundación para la Agricultura del Conocimiento, para que sea ésta la que gestione esta nueva plataforma, cuya característica esencial es la de ser una Red Social Profesional, compuesta por investigadores, tecnólogos, asesores y agricultores, en la que se integre el conocimiento, su transferencia y aplicación.

La experiencia desarrollada por APROGIP y su herramienta informática para facilitar la comunicación e intercambio de conocimiento entre actores del sistema en todo lo relacionado con la sanidad vegetal, ha servido de base para su ampliación al resto de protagonistas relacionados con cualquier otro ámbito de asesoramiento y de transferencia de tecnología.


APROGIP es una entidad asociativa profesional cuyo ámbito es la Comunidad Autónoma de Aragón, sin ánimo de lucro e independiente de asociaciones, grupos o partidos políticos, cuyos socios son personas o entidades ligadas a la producción de vegetales e interesadas en un uso sostenible de los productos fitosanitarios. En su creación fue determinante la entrada en vigor de una normativa que iba a afectar de manera importante al proceso de producción de vegetales para la alimentación humana y animal, ya que se extremaban las precauciones para evitar las posibles repercusiones negativas en la salud del consumidor y el medio ambiente, dando también por supuesto que habrá que atender a que la producción no solamente fuera sostenible sino que también fuera rentable.

La Fundación para la Agricultura del Conocimiento (FAC) es una organización fundacional de carácter privado constituida por el Colegio Oficial de Ingenieros Agrónomos de Aragón, Navarra y País Vasco y el Colegio Oficial de Ingenieros Técnicos Agrícolas, Graduados y Peritos Agrícolas de Aragón. Nació con el espíritu de impulsar el fortalecimiento institucional de ambas corporaciones, promoviendo el desarrollo profesional, cultural y humano de los ingenieros agrónomos y de los ingenieros técnicos agrícolas, cooperando para facilitar la adaptación al nuevo escenario de titulaciones universitarias de grado y máster y profundizando en las relaciones de colaboración que ambos Colegios mantienen, haciéndolas más sólidas, estables, visibles y eficaces.

Los fines que persigue la FAC son:

  • Contribuir de forma activa en los procesos de innovación y transferencia de conocimientos en el ámbito agroalimentario, promoviendo la cooperación entre el sistema de investigación y el sector agroalimentario.
  • Potenciar y facilitar la interlocución y colaboración con el sector agroalimentario, con las administraciones públicas, universidades y centros de investigación y con el resto de la sociedad.
  • Facilitar la formación continua de los profesionales mediante una oferta de calidad